La música de Tristán Crowley es una melódica y poética expresión de sus experiencias vitales, sus reflexiones y pensamientos. Inspirado por su difunto padre, Crowley comenzó su carrera musical como cantante hasta decidir escribir e interpretar sus propias canciones, acompañado de la vieja guitarra de su padre.
La música de Crowley es reflejo del autor en muchos aspectos: basada en la experiencia y difícil de encajar en un solo lugar. Crowley comenzó a cantar y tocar en Alemania antes de mudarse al País Vasco en 2005, aunque sus raíces irlandesas siguen siendo evidentes y fue de hecho en Irlanda, donde primero interpretó muchas de sus canciones en público. Se mueve entre una gama de géneros e influencias, pero él incide en que su entorno, un buen paseo y las experiencias vitales son sus principales fuentes de inspiración, y ellas dan dan a su música su carácter único.
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